Cornudísimos I

¿Y qué te parece el nuevo vecino, cielo? Un poco engreído, ¿no?



Quiero hacer público mis cuernos, amor. Sigue chupando. 



-Muévete así, puta. 
-Uy, cari. Este tío me ha llamado "puta" delante de ti. ¿No vas a poner orden en tu casa?




Ay, amor. No sabía que íbamos a tener invitados en nuestra cena de aniversario. 




Que tu mujer encima se pusiera tu sombrero favorito era un valor añadido a tus cuernos. 




Estás escondido en el armario para que tu amigo siga creyendo que no sabes lo puta que es tu mujer.




Cariño, mírame al menos. 




Primer día de vuestra luna de miel en París y aún no te ha dejado tocarla. 




Da mala suerte ver a la novia antes de casarte. Recuerda. 




-Chúpamela un poco. Se suponía que iba a ser un trío. 
-Ay, no me apetece ahora. ¿Te enfadas? 




Tus lloriqueos apenas se oyen mientras ella se corre otra vez. 




Tu mujer y su dichosa manía de saludar a las visitas desnuda. 




-Si quieres, participo. 
-No. Quiero que sólo veas cómo me follan.




Shh, él piensa que tú no sabes nada. 




Es el orden natural. 




Tú te chupas un dedo, desde luego. 




Le compras el vestido y ahora se lo quitas para que otro la empotre. 




El tamaño sí es importante, joder. Estaba completamente equivocada. 




¿Ves por qué te tengo que poner los cuernos?




Le regalaste ese conjunto para San Valentín. 




-Mi novio sólo tiene una erección cuando me ve follando a otro tío, ¿sabes? 
-Será maricón. 
-Oh, sí, estoy segura. 




No tenían piedad de ella, ni siquiera sabiendo que era tu mujer. 




La quieres tanto que sólo deseas lo mejor para ella. 




Los hombres de verdad no se ponen preservativos. Toma y cierra la boca. 




Joder, tu marido está mamando tu dildo. Creo que me voya correr por culpa de lo cornudo que es. 




Estoy muy mojada, sí. Me pone mucho tu amigo. Sí. 




¿Le deja usted a mi marido que me coma el coño un momento, por favor?
Gracias. Es muy amable, señor. 



Y la habitación la pagas tú, claro. 




Cómele los huevos ya que estás, cornudo. 




Por un momento a tu mujer se le olvidó que estabas delante. 




O miras o te largas. Pero déjame tranquila. 




El amor no tiene nada que ver con el sexo. 




-¿Te has corrido ya, amor?
-Joder, cinco veces.




No te cabe entera, cielo. Es enorme. Yo no puedo darte algo así. 




-No me enfado, amor. Me gusta verte feliz. 
-Ay, gracias. 



Salir antes del trabajo tiene sus inconvenientes.
Ahora tendrás que esperar en la calle, porque no te gusta molestarla. 




Ella no sabía si le gustaba más el tamaño de su polla o la falta de respeto que te tenía sabiendo
 que eras su marido y que estabas en la misma habitación. 




Ves cómo mi mujer podría ser una gran secretaria para ti. ¿Qué dices? 




Hola amor. Esto no significa que no te quiera, sólo que a veces necesito algo que tú no puedes darme.




Los tres sabéis que luego te harás una paja viendo el vídeo. 




Ver que lo que más quieres es sólo una puta barata para él. 




Dile que es un cornudo mientras me follas, vamos. A él le gusta que se rían de él. 




Sí, ponte cómodo, pringado. Que esto va para largo. 






Ya no es sólo que a ti nunca te ha dejado hacerlo, es que él la esté llamando "puta de polígono" mientras lo hace, ella parece encantada y encima le acaricia los cojones para mayor cornamenta. 





No hay manera de lamerle el coño a tu mujer si lamerle también la polla al negro. 





Al menos te ha dejado en la sombra. 




Sí, es muy solícito y atento. El pobre. 




Anda ven que vas a probar a qué sabe un hombre de verdad, cari. 




Termino de joder a mi marido un poco más y estoy para servirte. 




Oír a tu mujer cómo le dice a otro hombre que es mejor que tú
 te atraviesa el corazón y te la pone dura al mismo tiempo. 




¿No decías que tu mujer es una mandona? Pues conmigo es muy sumisa, mírala. 




Tu mujer y ese desconocido estaban tan calientes que no os dio tiempo de llegar a casa.




Ningún marido estéril permite que otro hombre insemine a su mujer. Salvo tú.




Hoy aplícate que tenemos público.




Sabíamos que no harías nada si nos pillaras follando. 
Pero nunca que te quedarías a mirarnos. ¡Menudo cornudazo! 




Cariño, con tu permiso me voy a correr otra vez sobre su polla, ¿vale?





Joder, he pagado a putas menos guarras que tu mujer.




Espero que te guste la sorpresa, amor. Sabía que te alegraría ver de nuevo a tu ex.




No puedes competir con ellos.





¿Estás celoso?






Escuchar a tu mujer gemir agradecida mientras le come la polla a otro
es lo más parecido a que te follen la autoestima para siempre. 





Tranquila, amor. Nadie te la va a quitar. Esta polla es toda entera para ti solita. 
Te la mereces. 




Un vistazo breve para confirmar que su marido lo está viendo todo. 




Tu mujer se acaba de meter la imponente polla de tu jefe en la boca
y tú ya has eyaculado derrotado en tus calzoncillos. 





Ay, cariño. Este tío se está riendo de ti mientras me folla. 
¿Cómo puedes correrte así sin tocarte? Eres patético. 






Ya da igual el tiempo que pase. Siempre que mires la preciosa cara de tu mujer
 sabrás que lleva la marca indeleble del semen de otro tío.  





Va a ser nuestro bebé, cariño. Aguanta un poco más. El señor ya está a punto de eyacular.
Aguanta, amor. Lo estás haciendo muy bien. Este señor me va a permitir ser papá... Es tan ilusionante. 


 


Esa mirada desafiante sabe que jamás podrías apartarla de esa polla negra. 

 

Comentarios

Entradas populares